En esta zona haciamos frecuentes Juegos
Amplios con nuestros antiguos muchachos dónde muchos
de ellos aprendieron ha hacer fogatas, refugios, a
cocinar, rastreo, etc. (en la fecha que escribo esto
alguno de ellos ya es un Maestro Explorador y otros
de ellos y ellas estudian carreras profesionales,
habiendo algunos culminado sus carreras
universitarias o ya ejercen profesiones diversas y no
faltan algunos que ya son padres o madres de
familia).
Una de la
aventuras favoritas era por cierto cruzar el puente
de ferrocarril de mas de 200 metros sobre el río
viendo entre los rieles las turbulentas aguas del
Rímac. Hoy pueden verse las pilas de basura
acumuladas.
Ya
cruzando el puente se extendia hacia el este una zona
de bosquecillos y cañaverales y por el oeste la otra
zona de humedales, alimentado por un puquial que fue
tapiado hacia fines del 2002. Pero para 1998 esta
zona aún existía y yo solía visitarla
frecuentemente con mi hijo y con algunos amigos que
nos acompañaban, en esta zona aparte de observar
aves solíamos atrapar peces pequeños para nuestras
peceras.
En
las márgenes del río crecian entre los montículos
de piedra una plantas ra
streras, sumamente
flexibles y resistentes que soliamos cortar en
longitudes de mas de 2 metros para usarlas como
cuerdas.
Hoy
esta zona es un gigantesco depósito de desechos
plásticos, la acumulación es tal que prácticamente
asfixiaron los humedales de este lado.
Avanzabamos
un poco mas y si ya eran cerca de las
cinco podíamos asistir a un
interesante "cambio de guardia": las
golondrinas en grandes cantidades armaban su
característico revuelo antes de acostarse, mientras
iban saliendo los murciélagos en igual o mayor
cantidad.
Había una carretera afirmada que
cruzaba la linea del ferrocarril. Hoy está asfaltada
y corresponde a la prolongación de la autopista
Ramiro Prialé y no es necesario decir que hay
alumbrado eléctrico y ya no se ven murciélagos.
Mas
allá llegábamos al cerro y era sumamente
emocionante cruzar el tunel de mas de 300m de largo
que lo atravezaba, hoy esta convertido en un gran
basural y gigantesca letrina.
Pasando
el tunel una de las actividades que hacíamos era
practic
ar escalada en roca en
las paredes del cerro que estaban junto a la salida
del tunel, paredes que tenian mas de 5 y hasta 7m de
altura.
Por
cierto que la acequia que rodeaba el cerro era
también muy atractiva aunque peligrosamente profunda
con mas de 1m de profundidad y mas de 1m de ancho en
algunos tramos, con una corriente muy fuerte, claro,
con peces guppys. Si seguíamos la acequia hacia el
este llegábamos a una especie de laguna donde
podíamos, ocasionalmente, ver patos silvestres. (ver
La Ultima Laguna
de Huachipa)
Además nos
gustaba subir el cerro. Lo subimos decenas de veces
con mi primo Marcos y mi hijo Damir y en mas de una
ocasión con Miguel, Fabian, Juan Pablo y Lucho, para
poder volar cometas (¿grandulones con espíritu de
niños?, si ¿y qué?). Hoy la cara del cerro que
mira hacia el norte está rodeada de letreros que la
indican como zona militar y la cara opuesta (que
puede verse desde la Carretera Central) esta ocupada
por un asentamiento humano (origen del basural del
tunel).
Aún puden
verse los gallinazos y algunas aves de rapiña, pero
lo demas se está replegando cada vez mas, y sufro
pensando en lo que perdimos y en lo que nos depara el
destino.
TRANSPORTE
PUBLICO: Hoy en día todos los carros que pasan
por la carretera central e incluso hay lineas que
pasan por la prolongación de la autopista Ramiro
Prialé desde la av. Manco Capac en el centro de
Lima, pero, ¿ya para que?
FACILIDADES: Antes solo algunos
kioscos (los clásicos "tambos" de las
zonas rurales). Hoy hay un par de
"canchitas" de fulbito y hasta se vende
cerveza, sin embargo quiero recordar que hace un par
de años encontraron el cadaver de una mujer entre
las chacras que quedan y para este año (2003) se
encontró otro cadaver. Creo que es mejor evitar
problemas.
En
esta página se aprecian fotos de algunos
especias que podíamos
capturar en los pantanos (además de guppys,
renacuajos, caracoles
negros-redóndos y cónicos e insectos, y de vez
en cuando, espadas). La
llave en las fotos es para establecer una
relación de tamaño.