Los cienpies de
los diversos tipos son animalitos sumamente agresivos
y siempre en pie de lucha. Dependiendo de la especie
pueden llegar ser desde los 8cm hasta los 35cm. Los
que hemos visto van entre 15 a 20cm con un color
apagado o a herrumbre. Existen con patas mas o menos
alargadas y casi ninguno tiene excatamente 100 pies,
hay algunos hasta con 173 pares de patas (o sea no es
un "cienpies" sino un "346 pies")
y algunos solo tienen 10 pares de patas.
Existen más de 3000 especies de ciempiés en el
mundo. Se distribuye en varios países del mundo,
incluyendo Perú, son controladores de plagas
naturales, de temperamento agresivo, no se recomienda
interactuar con ellas.
La cabeza redondeada y aplanada lleva dos largas
antenas articuladas y su boca esta armada de
mandíbulas que son en realidad patas modificadas,
que son venenosas, y algunos personas mencionan que
son mas peligrosas que las arañas aunque esto no se
ha comprobado científicamente.
Los ciempiés no se aparean o copulan. Para
reproducirse los machos producen unas bolsitas con
espermatozoides que se les llama espermatóforo que
las hembras recogen de los suelos. En algunas
especies el macho produce un tipo de “baile
nupcial” para estimular a la hembra a que recoja
el espermatóforo.
Están en diversas partes del Perú, en Lima los
hemos visto la primera vez en las alturas de
Huariquiña tanto en el campo viviendo debajo de las
piedras o en agujeros en las casas.
Cienpies capturado y
fotografiado por Damir López en Matucana
Hablemos del
género Scolopendra. Este es un género de
miriápodos quilópodos de la familia Scolopendridae.
También conocidas como ciempiés, son miriápodos
que poseen entre 21 a 23 pares de patas, existen
especies de diferentes colores y tamaños, algunas
logran alcanzar los 35 cm de largo, son excelentes
cazadores desde su nacimiento, cazan literalmente
cualquier animal que esté a su alcance, inyectando
un potente veneno que paraliza y derrite a sus
presas. El tamaño de las especies que forman este
género parece estar vinculado con el clima en que
habitan. En un clima templado, sólo crecen especies
relativamente pequeñas, mientras que las especies
que viven en los trópicos pueden exceder los 30
centímetros de longitud.
Las Escolopendras son depredadores activos que se
alimentan principalmente de invertebrados terrestres,
especialmente insectos y moluscos. Algunas especies
pueden depredar sobre vertebrados de pequeño
tamaño, como reptiles, roedores o murciélagos. ?
Sus mordeduras son muy dolorosas, pero raramente son
mortales en los seres humanos.? El veneno se inocula
a través de las forcípulas, que se encuentran justo
detrás de las mandíbulas. El veneno de las especies
que forman el género Scolopendra contiene compuestos
tales como la serotonina, un fosfolipasa A
(hemolítica), una proteína cardiotóxica y una
sustancia citolisina.?
Scolopendra fue uno de los géneros creados por
Carlos Linneo en su décima edición de Systema
Naturae (1758), el punto de partida de la
nomenclatura zoológica. Sólo dos de las especies
originalmente asignadas al género siguen siéndolo
en la actualidad: Scolopendra gigantea y Scolopendra
morsitans; el último fue designado como especie tipo
por el dictamen 454 de la Comisión Internacional de
Nomenclatura Zoológica,? invalidando la designación
anterior por Pierre André Latreille, en la que
eligió 'Scolopendra forficata de Linneo (en la
actualidad Lithobius forficatus) como la especie
tipo.?
El ciempiés gigante peruano, o por su nombre
científico Scolopendra Gigantea, es un tipo de
miriápodo recientemente popularizado como mascota
exótica. Es un animal imprevisible, agresivo y
venenoso. En esta especie los adultos pueden medir de
25 a 30 centímetros de largo viviendo de de 4 a 8
años dependiendo del sexo (las hembras viven más).
El veneno de la escolopendra produce dolores agudos
en las personas y en casos extremos paralisis
muscular y necrosis. Generalmente los dolores por mas
agudos pasan en unos dias.
Las Escolopendras mudan de 6 a 8 veces. La cantidad
de muda dependerá de la especie siendo generalmente
los machos los que mudan 1 vez menos que las hembras.
Las hembras ponen de 15 a 60 huevos que eclosionan de
1 a 3 meses. La hembra protege y lame los huevos para
que no se desarrollen hongos hasta que nazcan las
crías y se separen.